La semana pasada, cuando la Vicepresidenta Harris aceptó la candidatura para la presidencia en la Convención Nacional Demócrata (DNC), se hizo evidente que el Partido Demócrata está tomando una dirección preocupante y cada vez más peligrosa en cuanto a la inmigración. Hoy, ella anunció que quiere continuar construyendo el muro fronterizo de Trump. Es hora de hablar del tema.
En su discurso de aceptación, la Vicepresidenta Harris nos contó sobre sus padres inmigrantes y habló sobre los Estados Unidos como un país “para las personas que trabajan duro y persiguen sus sueños”. Sin embargo, en cuanto a las políticas de inmigración, no sólo no se comprometió verdaderamente con nuestras comunidades, sino que también reforzó políticas y lenguaje que reflejan ideologías de la extrema derecha—priorizando las deportaciones y la seguridad fronteriza de maneras que prometen más daño que protección.
La realidad de los demócratas y su proyecto de ley de fronteras
No estamos sugiriendo que los demócratas hayan sido perfectos. Sin embargo, en las últimas dos décadas, han pasado de una retórica centrada en un camino hacia la ciudadanía— ejemplificada por el expresidente Obama con su frase “somos una nación de leyes, pero también somos una nación de inmigrantes”— a convertirse en el partido de las deportaciones y seguridad fronteriza, disfrazada de seguridad pública.
Este cambio no solo es decepcionante; es peligroso. Pone en riesgo innumerables vidas, valida las narrativas promovidas por la extrema derecha y socava la seguridad de las comunidades inmigrantes y de miles de hogares con estatus migratorio mixto.
La promesa de la Vicepresidenta Harris durante su discurso en la DNC de reintroducir el proyecto de ley de seguridad fronteriza y firmarlo como ley se traduce en una política fronteriza más militarizada y restrictiva, comprometiendo los derechos y las libertades de los inmigrantes. Dejemos claro lo que significa “seguridad” en el contexto de este nuevo proyecto de ley fronteriza:
- Aumento a la Seguridad Fronteriza y detenciones: Más agentes de la patrulla fronteriza, más financiamiento para avances tecnológicos y más recursos dedicados a ICE, incluyendo fondos para agregar 50,000 camas más en centros de detención, un aumento del 47% respecto a 2023.
- Restricciones al Asilo: Estándares y procedimientos más estrictos para los solicitantes de asilo, lo que hace que sea significativamente más difícil para los más vulnerables encontrar refugio. Esta política, enmarcada como “cierre de vacios,” efectivamente cierra la puerta a quienes más necesitan seguridad.
- “Autoridad de Emergencia Fronteriza”: Esta regla se activa cuando el número de personas en la frontera alcanza un límite diario específico, lo que significa que muchos podrían ser deportados de regreso a sus países sin la oportunidad de explicar su necesidad de asilo, simplemente por el número de cruces ese día. Esto puede suceder en cualquier momento y no se requiere que se anuncie públicamente.
¿Y ahora qué?
Entendemos lo que está en juego. Reconocemos los peligros de una segunda administración de Trump, y estamos comprometidos a luchar para asegurar que no sea reelecto. Pero tenemos la responsabilidad de luchar por nuestra comunidad y presionar al Partido Demócrata cuando adopten posturas dañinas sin rendir cuentas. También es importante reconocer que esta postura dificulta aún más convencer a nuestra gente de votar en noviembre.
Esta estrategia es débil e ineficaz, perpetuando las mismas amenazas que afirma desmantelar y jugando directamente en manos de quienes sostienen la supremacía blanca. En este momento, estamos firmes en nuestra posición, y te necesitamos con nosotros.
Independientemente de lo que suceda en noviembre, nos mantendremos organizades y listes para actuar. Movilizando a nuestra gente, educando a los votantes y fortaleciendo las habilidades de nuestra base, estamos asegurando que el impulso en la lucha por políticas justas y humanas continúe desde el primer día.
¿Quieres unirte a nosotros y subir de nivel? Únete a nosotros en Lánzate 2024 — el primer gran encuentro de organizadores Latines provenientes de todo el país y Puerto Rico tras las elecciones presidenciales, y será una buena oportunidad para discutir cómo seguimos adelante, no importa quién esté en la Casa Blanca.