Un hogar político alberga la promesa de un ambiente cálido al cual podemos llegar después del frío, un lugar donde podemos sentarnos con tranquilidad y salir renovados, listxs para seguir luchando por un futuro mejor, para nosotrxs y por nosotrxs.
Nuestro Trabajo
Nuestra trayectoria en organización política nos ha enseñado que nadie va a venir a salvarnos. Nos transformamos a nosotros mismos para salvarnos a nosotros mismos, y lxs unxs a lxs otrxs.
Vemos una gran necesidad de desplazarnos tan rápido como la vida avanza en estos tiempos. Necesitamos organizaciones que están formadas para ser ágiles y flexibles, que se adaptan y experimentan más de lo que predicen y pronostican. Por eso, decimos que Mijente es una formación híbrida, un centro de actividad, una colmena de abejas, en parte digital y en parte el mero juego de organización de batalla. Buscamos relacionarnos e interactuar con personas en múltiples niveles, desde en línea hacia las calles, en sociedad y a través de colaboraciones.
Creemos que nuestro mejor chance para ganar es a través de la constante organización con nuestra gente, en luchas electorales, acción directa y digitalmente. Hemos sido testigxs de conexiones mágicas que surgen cuando compartimos un espacio, por lo que siempre mantendremos un pie en el suelo a través de eventos, círculos locales y clanes, y organizaciones asociadas. Pero tampoco creemos que la ubicación o territorio es una restricción, así que hemos expandido nuestras raíces a las calles del internet.
Somos lxs primerxs en responder cuando unx o varixs miembrxs de nuestra comunidad están siendo atacados. Trabajamos arduamente para reducir el daño mientras permanecemos alertas a cualquier oportunidad de tirar una puñalada al establecimiento (específicamente atacando la opresión sistemática al desenmascarar malos políticos o corporaciones).
Creemos que nuestra gente no puede tolerar cuatro años más de desesperación, miedo, y los efectos de la creciente criminalización sistemática. Nuestro plan de ataque es ganar en la urna electoral movilizando a los votantes Latinx contra Trump. Dicen que hierba mala nunca muere, así que echemos la hierba mala fuera de la Casa Blanca.
Cuando decimos que somos un hogar político, nos referimos a un espacio de conexión, para tomar pausas juntxs, y donde podemos afinar nuestras estrategias y co-conspirar en nuestra propia comunidad y en comunidad con otrxs.